Mermelada de auyama

Normalmente encontramos la auyama en preparaciones saladas, sin embargo su uso como ingredientes de postres es bastante común. Así encontramos la auyama en tortas, pudines, en almíbar, etc. Les presento esta vez una mermelada muy sabrosa, matizada con el cítrico de las naranjas y un toque picante que lo proporciona el jengibre. Fácil y económica como son la mayoría de nuestras recetas.

Ingredientes:

• 1 Kg. de auyama madura, de color intenso
• 1/2 litro de jugo de naranja
• Un trocito de jengibre
• 3 limones
• 1/2 kg de azúcarProcedimiento:
• Seleccionar una auyama madura, cuyo color sea intenso, eso hace que el tanto el sabor como el color de la mermelada sea también más intenso.

Lavar muy bien la auyama y cortarla en trozos, para pelarla con mayor comodidad.

• Rallar la auyama por el lado fino del rallo.
• Otra opción es cocinarla y luego licuar con el jugo de naranja.
• Me gusta rallada porque así el resultado es más masticable, y de fina fibra.
• Limpiar, pelar y rallar el trozo de jengibre

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  Seguidamente proceder a medir por tazas la auyama rayada, esto para determinar la proporción de azúcar, que será de 1/2 taza de azúcar por taza de auyamaUna vez medida la cantidad de auyama procedemos a agregar la cantidad de azúcar necesaria, incorporar el jugo de naranja y el jengibre rallado, el jugo de dos limones mezclando todos esos ingredientes para comenzar la cocción. Cuando la tengamos casi lista, agregaremos ralladura de la concha del tercer limón.

  

  

  Esta cocción debe ser a fuego muy lento y prolongado en el tiempo. Muy vigilada y removida para que no se queme. Mi secreto con ésta y otras mermeladas, es ponerlas en baño de maría, de ese modo se alarga el tiempo de vigilancia, no se queman, sólo estar pendiente de agregar agua para que no se seque el recipiente que la contiene.

• El movimiento debe ser siempre moviendo la paleta por el fondo de la olla, desde ti hacia el lado opuesto, haciendo una especie de olas. No revolviendo dando vueltas, porque la mezcla se llena de aire hace burbujas que explotan y salpican.
• Sabemos que la mermelada está lista, cuando tiene un color acaramelado, la consistencia es pegajosa y al pasar la paleta por el fondo de la olla lo deja libre.
• Con las mermeladas hay que tener paciencia, ellas suelen lograr mejor punto si se suspende la cocción y se continúa al dia siguiente. Aqui podemos observar como ha cambiado el color, hacia un dorado acaramelado. Ya sólo es cuestión de que seque un poco más si así lo deseamos. Y a envasar. Tendremos mermelada para un buen rato.